Una entrada a bombo y platillo

La entrada de un edificio es la carta de presentación del mismo, algunos pensarán que es lo de menos, pero no, justamente es un anticipo de lo que encontrarás al interior, el diseño, la distribución de los espacios, etc. Por lo tanto, una entrada debe también hacer juego con el resto de la infraestructura.

Aquí te mostramos diferentes tipos de entradas tanto en construcciones rústicas, como contemporáneas, para que cada vez que llegues a tu casa ¡lo hagas a lo grande!

Una entrada en madera, en forma de arco, estructura utilizada desde la antigüedad, es la entrada perfecta para una construcción rústica, como la entrada típica de un monasterio. Además, un arco no solo es un diseño con utilidad estética, sino que sirve como soporte y al mismo tiempo da lugar a una apertura.

Si queremos algo más minimalista y menos ostentoso, Roar Studio decidió camuflar la puerta del mismo color que las paredes, un detalle muy fino, delicado y simple.

Para los edificios públicos una entrada de vidrio es perfecta, puesto que se insinúa que está abierto para todos, y las personas que transitan pueden ver el interior y sentirse atraídos. Además, la puerta de acceso se encuentra en una plaza pequeña muy agradable, iluminada, con plantas, y un banco, lo cual también incita a pasar por allí.

El camino hacia la entrada de nuestro hogar evitará que las personas pisen el césped, el estudio pensó en este caso en una puerta elegante, pero que a su vez se ve muy segura, y su color alude al metal, y nos hace pensar en la privacidad y la resistencia.

Los largos caminos que conducen a las viviendas son muy agradables, pasar por zonas verdes largas al llegar a casa permite airease. Además, evita el tránsito de cualquiera que no habite por el área puesto que el camino conduce a propiedades privadas.

El estudio BIA Arquitectos optó por una entrada más notoria gracias a la aplicación del isódomo, un aparejo que dispone los materiales constructivos en un muro, este es en hiladas, y era muy utilizado por los griegos. Además, para crear la apertura escogieron el dintel trasdosado, un elemento estructural horizontal que crea la apertura conformando en este caso la puerta principal.

Una entrada con escaleras y tejado separa en cierta manera la vivienda de la calle. Los detalles de plantas y el tejado con aperturas que permiten crear efectos con la luz, decoran la casa de una manera simple y le da un toque muy moderno y minimalista.

Las entradas que tienen decoraciones a cada lado siempre serán bien vistas, que, además, le darán una perspectiva de amplitud y grandeza al inmueble. En este caso las piedras son muy minimalistas y permiten conservar los colores neutros como el blanco el negro y el gris.

Todo un muro que protege la casa es ideal para aquellos estilos rústicos, con materiales naturales, además se conserva mucho más la privacidad. Esta pequeña puerta en dintel causa una enorme curiosidad, seguramente todos entran allí pensando que es un palacio secreto.

Una puerta doble hoja es un estilo que se utiliza cada vez menos, sin embargo, este tipo de entradas eran muy utilizadas antiguamente, y definitivamente le da aires de nobleza. En este caso, la puerta de madera de doble hoja se vuelve un elemento decorativo con alta notoriedad.

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Una entrada a bombo y platillo

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